Puedes presentarte ? Mi pasión por el cuerpo humano comenzó cuando me convertí en profesora de Pilates, luego rápidamente me llevó más allá en el estudio del cuerpo, el movimiento, la Pedagogía Somato-Psico...
¿Cuándo y cómo desarrollaste esta pasión por el yoga? Hace 8 años después de un tsunami sentimental.
¿Qué significa esto en tu vida diaria? ¡Parte de mi trabajo y sobre todo mi remanso de paz!
¿Encuentras tiempo para practicar durante tus viajes? Intento encontrar el tiempo, aunque sean unos minutos, para conectarme con mi cuerpo a través de la respiración y el movimiento y sobre todo saborear la serenidad que esto me aporta.
¿Cuál es tu producto YUJ favorito? Me gusta todo, lo admito, ¡es moda/deporte/chic!
Mis favoritos, los leggings “Mulhadara”, un auténtico “softie” que no te quieres quitar
El mundo
¿Cuál es tu país favorito hasta ahora? Sueño con visitar muchos países, pero soy un gran admirador de Estados Unidos. Los parques nacionales, el desierto, California...
¿Alguna buena dirección para compartir? Hmm, terrible pregunta, amé tantos países: desde la amabilidad de la gente en Colombia hasta las increíbles playas de Zanzíbar, desde la serenidad de Sri Lanka hasta las cálidas cascadas de Costa Rica, los amaneceres en el Serengeti en Tanzania... Creo que ¡No voy a contestar! Todo es tan diferente y me alimento de esta riqueza.
¿Para usted es “el lugar para estar”? En Kerala (en el sur de la India) "Raheem Residency", una hermosa residencia histórica de la década de 1860 (perteneciente a un rico comerciante que tanto amaba a Ghandi y lo recibió en esta misma residencia muchas veces), ahora comprada y renovada por un entusiasta que lo transformó en un pequeño hotel de 10 habitaciones.
Indiscreciones
En el cine, ¿qué actores/directores te hacen soñar? Steven Spielberg Guillaume Canet, Ben Affleck y dos, muy clichés, pero que me encantan: Brad Pitt y Jonny Depp.
¿Una frase que te defina? “Desapegarse de todo para no ser indiferente a nada”.
¿Cómo es un día en la vida de Audrey? A menudo me levanto de muy buen humor, me preparo un buen chorrito de limón que me encanta y luego le doy un abrazo enorme a mi hija.
Una vez en el colegio, reviso mi correo electrónico... ¡con una Nespresso doble que disfruto muchísimo (sé que no es muy yogui)! Luego si tengo tiempo, una hora de Yogalates (mezcla de Pilates y yoga) y le agrego los movimientos que mi cuerpo necesita ese día, o bien, hago Yoga puro. Después devoro una manzana grande y acudo a mis citas (soy terapeuta de movimiento y coach privada). A las 14.00 vuelvo a comer a casa, a menudo en el menú quinoa/verduras... ¡y en invierno termino con toneladas de nueces y chocolate negro! Por la tarde, encuentros con clientes, pero sobre todo estudios diversos y variados, psicopedagogía somato y una vez a la semana energética y shiatsu. Luego tomo mi merienda dulce... y me voy... Y vuelvo, voy de compras para la cena... Una vez que mi hija se acuesta, me ato y estudio de nuevo. Cuando ella no está conmigo, salgo a cenar con mi hombre y/o mis amigos...
Aunque a veces los días sean iguales, siempre me aseguro de traer cambios y sobre todo algo nuevo para darle “sentido” al camino de mi vida y sobre todo, rociarlo de alegría.
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